Como ya hemos explicado en otras ocasiones, la gingivitis es un problema muy común de las encías que puede tener graves consecuencias en la salud general. Y aunque éste puede estar motivado por diversos motivos, en este caso nos centramos en la gingivitis gestacional, que se desarrolla durante el embarazo de la mujer.
¿Qué es la gingivitis gestacional?
La gingivitis es un problema frecuente durante el embarazo. Este consiste en una enfermedad de las encías que provoca su inflamación y sangrado como consecuencia de la infección que destruye los tejidos que soportan las piezas dentales.
La gengivitis aparece por los efectos a largo plazo que tienen los depósitos de placa en la zona de las encías. Y aunque en un principio no ocasiona ningún riesgo, es importante detectarla a tiempo y tratarla. Ya que en caso de complicarse podría provocar un parto prematuro.
¿Por qué aparece la gingivitis gestacional?
La gingitivis es una enfermedad de las encías que puede padecer cualquier persona. No obstante, durante el embarazo se dan determinadas circunstancias que hacen que dos de cada tres embarazadas la sufran.
Uno de estos motivos es el incremento de flujo sanguíneo que se produce durante le embarazo. El cuál causa inflamación y dolor en las encías, incluso sangrado, lo que aumenta el riesgo de padecer gingivitis.
Otro factor a tener en cuenta en el desarrollo de la gingivitis gestacional es el aumento de los niveles hormonales. En esta etapa las encías y los dientes son más sensibles a las bacterias que se ocultan en la placa dental.
Por otro lado, durante el embarazo muchas mujeres sufren náuseas, lo que en ocasiones puede provocar que se tenga aversión a la pasta dental o una higiene dental profunda por miedo a los vómitos. Siendo los vómitos otra causa de que el esmalte de los dientes se dañe y la boca se vuelva más sensible.
Y por último, también durante el embarazo puede tenerse más congestión nasal de lo normal por el exceso hormonal que inflama las mucosas nasales. Así que se tiende a respirar frecuentemente por la boca, lo que aumentaría el riesgo de gingivitis y caries.
¿Cómo prevenir la gingivitis?
Se esté embarazada o no, el mejor remedio para prevenir la gingivitis es llevar una correcta higiene bucal. Para ello, es imprescindible lavarse los dientes después de cada comida, o al menos todos los días antes de acostarse. Recuerda que si consumes una gran cantidad de azúcares, la limpieza posterior es fundamental. Además, se tendrá que añadir a la limpieza dental el uso de hilo dental y enjuague bucal y visitar al dentista al menos una vez al año para hacerse una revisión o limpieza dental.
Otra forma de no padecer gingivitis es el uso de ortodoncia si los dientes no están correctamente alineados. Ya que el cepillo de dientes tendrá más dificultades para cumplir con su acometido si existe apiñamiento o una alineación indebida.
En el caso de sufrir ya gingivitis, es recomendable acudir al dentista para hacerse una limpieza dental profesional completa a la vez que se sigue una correcta higiene bucal. La gingivitis avanzada puede requerir una técnica de limpieza especial, como el alisado radicular, proceso durante el cual se remueve completamente la placa presente en las raíces de los dientes.
Puedes saber si tienes gingitivis si las encías sangran con facilidad al cepillarse los dientes o pasar el hilo dental, si están infllamadas, muy brillantes o enrojecidas. También puede causar llagas en la boca y un sabor desagradable que parece difícil de desaparecer.
Siguiendo las pautas dadas será sencillo prevenir la gingivitis durante el embarazo y ahorrarse un problema añadido en un momento tan importante para cuidar la salud.