El bruxismo es un trastorno que consiste en el acto involuntario de apretar los dientes y que puede relevar ansiedad y otros problemas psicológicos, así como poner en peligro las piezas dentales por su desgaste. Este comportamiento psico-neuro-muscular lo sufre una de cada tres personas, y dadas todas sus posibles consecuencias es importante diagnosticarlo y tratarlo lo antes posible.
Aunque una de sus consecuencias más inmediatas es el desgaste de los dientes, la hipersensibilidad dentaria y las posibles fracturas en las piezas dentales, el bruxismo puede afectar a otras áreas del cuerpo. Por ejemplo, este trastorno puede desembocar en dolores de cabeza, dolor facial, dolor en los músculos de la mandíbula, mayor tensión nerviosa y problemas en cuello y oídos.
La pérdida de esmalte que sufren los dientes por el continuo rechinar afecta también a las encías. Estos problemas en las encías pueden provocar una acumulación de bacterias en la zona que puede conllevar otros problemas de salud.
A pesar de que el bruxismo puede aparecer en cualquier momento del día, lo normal es que aparezca por la noche, motivo por el que la mayoría de casos no se diagnostican a tiempo.
Contenidos
¿Cómo puedo saber si tengo bruxismo?
Los síntomas más habituales se suelen encontrar en las áreas sensibles de la boca que están relacionadas con el proceso de masticación. Algunas de estas señales de aviso son:
- Inflamación de las encías
- Dientes flojos y pérdida de piezas dentales
- Dolor o sensibilidad en la mandíbula
- Dolor de cabeza
- Dolor de oídos
- Dolor en los músculos faciales
- Dolor de cuello
- Vértigos
- Estrés
- Insomnio
- Trastornos alimenticios
¿Qué es el bruxismo y qué consecuencias tiene?
El bruxismo es un trastorno que consiste en el acto involuntario de apretar los dientes y que puede relevar ansiedad y otros problemas psicológicos, así como poner en peligro las piezas dentales por su desgaste. Este comportamiento psico-neuro-muscular lo sufre una de cada tres personas, y dadas todas sus posibles consecuencias es importante diagnosticarlo y tratarlo lo antes posible.
Aunque una de sus consecuencias más inmediatas es el desgaste de los dientes, la hipersensibilidad dentaria y las posibles fracturas en las piezas dentales, el bruxismo puede afectar a otras áreas del cuerpo. Por ejemplo, este trastorno puede desembocar en dolores de cabeza, dolor facial, dolor en los músculos de la mandíbula, mayor tensión nerviosa y problemas en cuello y oídos.
La pérdida de esmalte que sufren los dientes por el continuo rechinar afecta también a las encías. Estos problemas en las encías pueden provocar una acumulación de bacterias en la zona que puede conllevar otros problemas de salud.
A pesar de que el bruxismo puede aparecer en cualquier momento del día, lo normal es que aparezca por la noche, motivo por el que la mayoría de casos no se diagnostican a tiempo.
¿Cómo puedo saber si tengo bruxismo?
Los síntomas más habituales se suelen encontrar en las áreas sensibles de la boca que están relacionadas con el proceso de masticación. Algunas de estas señales de aviso son:
- Inflamación de las encías
- Dientes flojos y pérdida de piezas dentales
- Dolor o sensibilidad en la mandíbula
- Dolor de cabeza
- Dolor de oídos
- Dolor en los músculos faciales
- Dolor de cuello
- Vértigos
- Estrés
- Insomnio
- Trastornos alimenticios
Las inflamaciones en las encías suelen producirse con más frecuencia por la mañana, cuando el paciente se acaba de levantar y lleva gran parte de la noche rechinando sus dientes inconscientemente.
Otra área sensible es la región del cráneo, donde la mandíbula se articula y descansa para realizar su función de masticado. Hablamos concretamente de la Articulación Témporo-Mandibular, que suele sufrir una carga excesiva que puede derivar en dolor de mandíbula y otros desajustes. En estos casos es común despertarse con la sensación de haber estado masticando con intensidad y sin descanso durante toda la noche.
También es frecuente notar las piezas dentales flojas, e incluso llegar a perderlas si no se trata a tiempo.
La mayoría de pacientes no son conscientes de que padecen bruxismo hasta que el desgaste resulta severo. Ante la sospecha, o el padecimiento simultáneo de uno o varios síntomas, desde Clínica Parra Vázquez recomendamos visitar su clínica dental habitual en busca de valoración profesional.
Por otra parte, muchos pacientes descubren que sufren este trastorno y pueden tratarlo a tiempo gracias a las visitas periódicas al dentista.
En ocasiones una férula de descarga es una posible solución para minimizar los daños en las piezas dentales y combatir la erosión que produce esta patología al producirse con más frecuencia por la mañana, cuando el paciente se acaba de levantar y lleva gran parte de la noche rechinando sus dientes inconscientemente.
Otra área sensible es la región del cráneo, donde la mandíbula se articula y descansa para realizar su función de masticado. Hablamos concretamente de la Articulación Témporo-Mandibular, que suele sufrir una carga excesiva que puede derivar en dolor de mandíbula y otros desajustes. En estos casos es común despertarse con la sensación de haber estado masticando con intensidad y sin descanso durante toda la noche.
También es frecuente notar las piezas dentales flojas, e incluso llegar a perderlas si no se trata a tiempo.
La mayoría de pacientes no son conscientes de que padecen bruxismo hasta que el desgaste resulta severo. Ante la sospecha, o el padecimiento simultáneo de uno o varios síntomas, desde Clínica Parra Vázquez recomendamos visitar su clínica dental habitual en busca de valoración profesional.
Por otra parte, muchos pacientes descubren que sufren este trastorno y pueden tratarlo a tiempo gracias a las visitas periódicas al dentista.
En ocasiones una férula de descarga es una posible solución para minimizar los daños en las piezas dentales y combatir la erosión que produce esta patología.