La dieta proteinada, o dieta proteica es aquella que limita el consumo de hidratos de carbono y aporta la cantidad necesaria de proteínas para que no se pierda masa muscular en el proceso de pérdida de grasa. No obstante, aunque sea una dieta muy recurrida, al igual que cualquier tipo de dieta, requiere estar supervisada por un nutricionista y no seguirse durante mucho tiempo. Ya que no se trata de una dieta equilibrada que aporte todos los nutrientes que necesita el organismo para un correcto funcionamiento.
Dieta proteinada para perder peso
Antes de seguir dando más información sobre las dietas proteicas, queremos recordaros que antes de recomendar un tipo de dieta u otra, nuestra nutricionista en Granada realiza un examen personal a cada paciente y analiza tanto sus objetivos, como sus necesidades. Esto es lo único que le permite establecer una dieta sana que se ajuste completamente a las necesidades de cada persona. Se trata también de un requerimiento fundamental cuando se quiere perder peso, ya que no todo el mundo tiene el mismo tipo de metabolismo o los mismos problemas de salud. Así que empezar una dieta generalizada puede conllevar serios problemas de salud, especialmente si se trata de una dieta especialmente restrictiva.
Este tipo de dieta, la mayoría de las veces tiene el objetivo de lograr una pérdida de peso rápida. Ya que al reducir el glucógeno muscular y hepático, el glucógeno se almacena con el agua y se utiliza como fuente energética.
Las dietas proteinadas tienen un alto contenido en proteínas, que pueden conseguirse a base de proteínas naturales, o provenientes de preparados comerciales. Sin embargo, restringen por completo otros nutrientes como los carbohidratos. Esto hace que a veces, en situaciones específicas y casos concretos, se obtengan buenos resultados si el objetivo es perder peso y se acompaña de ejercicio físico.
A corto plazo, estas dietas pueden conseguir la pérdida de peso que se busca al disminuir el aporte calórico y mejorar la resistencia a la insulina. No obstante, se trata de un régimen desaconsejado a largo plazo por ser desequilibrado y tener algunas contraindicaciones para la salud.
¿Cuáles son las contraindicaciones de las dietas proteinadas?
En la población general, una dieta proteinada podría favorecer el desarrollo de enfermedades crónicas, así como la promoción de concepciones erróneas sobre el efecto de los macronutrientes en el control del peso.
Cuando la dieta se centra en alimentos de base original, sin tener en cuenta las frutas y verduras, puede incrementarse el riesgo de sufrir litiasis renoureteral e incrementar la tasa de reabsorción ósea en humanos. Aunque no se ha demostrado que aumente el riesgo de desarrollar osteoporosis.
Por otro lado, si el índice de proteínas que se consuman es muy superior al recomendado, puede producirse un sobreesfuerzo de riñones e hígado considerable. Ya que en las dietas hiperproteicas, los riñones y el hígado realizan un esfuerzo extra para eliminar la proteína sobrante y metabolizar los nutrientes. Lo que a su vez puede incidir en el agravamiento de patologías ya existentes (insuficiencia renal) o en incluso que aparezcan otras nuevas.
Lo más recomendable es ponerse en manos de un especialista en nutrición, que te ayude a seguir una dieta personalizada y te indique las pautas a seguir en cada momento.
Dieta proteinada VS dieta hiperproteica.
Aunque tiendan a confundirse, en la dieta proteinada se aumenta el consumo de proteínas, pero sin llegar a sobrepasar las cantidades de proteínas recomendadas para la edad y el peso de cada persona. Mientras que en la dieta hiperproteica, se produce un aporte de proteínas en detrimento de otros macronutrientes, en niveles muy superiores a los recomendados.