La recesión gingival, o retracción de encías, emerge como un problema común que afecta a una gran parte de la población adulta mayor, deteriorando su calidad de vida.
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Tal y como explica el Dr. Óscar Castro Reino, presidente del Consejo General de Dentistas, “cuando un paciente sufre encías retraídas en los dientes anteriores, además de suponer un problema estético por la sensación de alargamiento dentario, la recesión gingival supone un problema clínico importante, dada la pérdida de inserción de la raíz en el hueso”. Ya que además de retraerse las encías, también lo hace el hueso que soporta a los dientes, provocando movilidad, y en ocasiones, la pérdida dental.
En este artículo, te contamos qué es la recesión de encías, sus causas, síntomas, así como las medidas preventivas y tratamientos más afectivos para abordar este problema dental.
¿Qué es la recesión de encías?
La recesión de encías es un proceso gradual en el que el tejido gingival que rodea los dientes comienza a retirarse o retroceder, exponiendo así las raíces dentales.
Esta condición puede causar sensibilidad dental, aumentar el riesgo de caries y enfermedad periodontal, y afectar negativamente la estética de la sonrisa.
Causas de la recesión de encías
Estas son algunas de las causas que pueden provocar la retracción de las encías:
- Edad: Aunque la recesión gingival puede sufrirse en cualquier momento, es más frecuente a partir de los 40 años. Así podemos saberlo gracias a la última encuesta epidemiológica de salud oral realizada en España. En ella, el 60% de los adultos jóvenes (de 35-44 años) y el 72% de los adultos mayores (de 65-74 años) presentaba algún grado de recesión gingival.
- Cepillado incorrecto o agresivo: El cepillado excesivamente vigoroso, o el uso de un cepillo de dientes con cerdas duras, puede desgastar el tejido gingival y provocar su retracción.
- Enfermedad periodontal: La periodontitis, una forma avanzada de enfermedad de las encías, puede causar la destrucción del tejido gingival y contribuir a la recesión de las encías.
- Genética: La predisposición genética puede influir en la salud de las encías y aumentar el riesgo de recesión gingival en ciertas personas.
- Bruxismo: El hábito de apretar o rechinar los dientes puede ejercer presión adicional sobre las encías y contribuir a su retracción.
- Prótesis mal ajustadas: Una prótesis mal colocada puede causar retracción de encías al provocar inflamación crónica.
- Factores ambientales: El tabaquismo, la mala alimentación, el estrés y otros factores pueden desempeñar un papel en el desarrollo de la recesión de encías.
son la edad, un cepillado dental agresivo, tener maloclusión, llevar una prótesis mal ajustada, padecer periodontitis y ser fumador.
¿Cómo se trata la recesión gingival?
La recesión gingival tiene un impacto estético, pero también afecta en la salud bucodental de los pacientes que la sufren.
Respecto al tratamiento de la recesión gingival, una vez que las encías se han retraído resulta muy difícil que vuelvan a su posición de forma natural. En casos avanzados, los pacientes tienen que acudir a una cirugía mucogingival, mediante la cual se reparan y cubren las áreas afectadas.
Los procedimientos más frecuentes para tratar la retracción son los injertos o colgajos.
Conclusión
Desde nuestra clínica dental en Guadix (Granada) insistimos en la importancia de acudir a las revisiones periódicas en el dentista, al menos una vez al año. Esta visita, permite a nuestros dentistas detectar cualquier problema a tiempo, evitando complicaciones y tratamientos más costosos e invasivos.