Sudamos cuando realizamos una actividad que requiere un esfuerzo extra. O cuando nos sometemos a temperaturas muy elevadas. Con este sudor nuestro cuerpo logra regular la temperatura. Sin embargo, algunas personas producen sudor en cantidades mucho mayores que las que el cuerpo necesita para controlar la temperatura. Esto es lo que se conoce como sudoración excesiva o hiperhidrosis.
En Clínica Parra Vázquez contamos con diversos tratamientos de medicina estética en Guadix. Entre ellos el tratamiento con toxina botulínica (botox), para tratar este problema de sudoración excesiva.
¿Qué es la hiperhidrosis?
La hiperhidrosis consiste en la sudoración excesiva en las zonas del cuerpo con mayor concentración de glándulas sudoríparas. Y esto pasa sin haber realizado ningún esfuerzo que pueda provocar el sudor, e incluso cuando la temperatura es baja.
Se trata de una afección muy frecuente que suele aparecer en la infancia o en la adolescencia. Y que se da tanto en hombres y en mujeres. Se calcula que lo sufren más de un millón de españoles.
Este problema afecta directamente a la calidad de vida de los pacientes. Ya que este puede limitar su rutina diaria, su trabajo e incluso sus relaciones sociales. En algunos de estos casos, la sudoración excesiva puede generar capítulos de estrés.
Síntomas de sudoración excesiva
Los síntomas de este problema son fáciles de percibir. La hiperhidrosis aparece como un exceso de sudor excesivo en axilas, palmas de las manos, ingles y plantas de los pies. Aunque a veces también es evite en zonas como la frente o el labio superior.
Otro síntoma consecuente es el mal olor corporal que genera este sudor. Por lo que se recomienda extremar la higiene y tomar las medidas oportunas para que se reduzcan sus efectos.
Causas de la sudoración excesiva
- Se desconocen las causas que provocan una sudoración excesiva. No obstante, algunos datos sugieren que la principal causa puede ser genética. Según la Health A-Z Encyclopaedia, dos tercios de pacientes que sufren este problema cuentan con un familiar con el mismo trastorno.
- Por otro lado, algunos factores como el estrés, la tensión o la ansiedad pueden incrementar la actividad de las glándulas sudoríparas y hacer que la hiperdrosis se vuelva más intensa. Las glándulas sudoríparas se activan como respuesta a una situación que nos desequilibra emocionalmente.
- En algunas ocasiones este sudor puede ser consecuencia de una infección mixta de hongos y bacterias.
- El calor hace que cualquier persona sude más de lo normal, pero en quienes padecen este problema, la producción de sudor se multiplica.
- Las personas que sufren sobrepeso u otros trastornos alimenticios también pueden generar más sudor del normal. En estos casos se aconseja cambiar de hábitos y seguir una dieta más saludable.
- Algunos alimentos pueden causar que sudemos de manera inmediata, como es el caso de las comidas picantes.
- La cafeína, el alcohol y el tabaco también pueden afectar al funcionamiento normal del organismo. Y por tanto, al sudor.
¿Qué es la hiperhidrosis secundaria?
Se conoce como hiperhidrosis secundaria a una afección menos común en la que el sudor excesivo se produce como síntoma de una enfermedad. Existen diferentes trastornos que pueden conducir a esta sudoración mayor de lo normal. Por ejemplo, puede tratarse de diabetes, trastornos del sistema nervioso, problemas de tiroides y algunos tipos de cáncer.
Otro tipo de hiperhidrosis es la conocida como hiperhidrosis localizada paroxística. Esta afecta principalmente a mujeres tras la menopausa, como consecuencia de un trastorno del sistema nervioso. También puede producirse este sudor excesivo por el consumo de ciertos medicamentos.
Si se sufre este problema, recomendamos acudir a un médico especialista que se encargue de elaborar una revisión completa y pueda realizar los exámenes de sangre y orina necesarios para determinar las causas de esta secreción excesiva.