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4 tips para conseguir que tus hijos tengan unos dientes más sanos

4 tips para conseguir que tus hijos tengan unos dientes más sanos4 tips para conseguir que tus hijos tengan unos dientes más sanos

Para los padres, la salud de sus hijos es una de las grandes prioridades de la vida. De ahí que cada día tratemos de inculcarles unos buenos hábitos, que intentemos alimentarles de la manera más sana posible o que evitemos situaciones o lugares que pueden ser peligrosos o perjudiciales para su integridad y salud. Entre todas estas cosas, velar porque los niños tengan unos dientes más sanos es otra forma más de cuidar de su salud general y fomentar que tengan unos hábitos más beneficiosos para su salud presente, y futura.

En Clínica Parra Vázquez contamos con grandes profesionales especializados en odontopediatra en Guadix, Granada.

Visitas al odontopediatra a partir del primer año

Cuidar la salud dental de los niños desde una edad temprana es fundamental en muchos aspectos. Por un lado, la prevención es siempre sinónimo de ahorro para los padres. Y por el otro, detectar a tiempo un posible problema siempre supone que dicha patología resulte más fácil y rápida de solucionar.

Lo ideal es visitar al dentista una vez que al niño le salgan los primeros dientes, y continuar con las visitas periódicas cada seis meses. En estas visitas, el especialista en odontopediatria valora el estado general de la boca del pequeño paciente; controla la posición de los dientes, la caída de las piezas de leche y la erupción de los definitivos; comprueba si existen caries, informa a los padres del estado de la salud bucodental de sus hijos, o de posibles problemas que puedan surgir en el futuro, y les da consejos para que los niños tengan unos dientes sanos.

Ayudarles en el cepillado de dientes después de cada comida

La higiene bucodental es fundamental a cualquier edad. Cepillarse los dientes después de desayunar, de almorzar y antes de irse a dormir es imprescindible para conseguir que los niños tengan unos dientes sanos.

Irse a dormir sin lavarse antes los dientes fomenta que las bacterias que se han acumulado durante todo el día se alojen en la boca y fomenten la aparición de caries y demás problemas que perjudican la salud bucodental.

A edades tempranas los niños necesitarán la ayuda de sus padres para cumplir con estos tres cepillados de dientes. De esta forma, además de hacer que tomen la costumbre de hacerlo y añadirlo a su rutina, los niños aprenderán la forma correcta de hacerlo. El dentista también tiene un papel importante en esta enseñanza del cepillado dental adecuado.

Evitar el exceso de azúcar en la dieta para tener unos dientes más sanos

La alimentación es un pilar clave en la salud de niños, adultos y mayores. En el caso de los primeros, los padres tienen el papel de hacer que sus hijos lleven una dieta sana y equilibrada, que les proporcione todos los nutrientes que necesitan para su correcto desarrollo y crecimiento.

En esta tarea a veces se interponen los alimentos dulces que tanto gustan a los niños, como el chocolate, los helados, las chucherías, refrescos o zumos. En todos estos casos no hay que olvidar que el azúcar además de fomentar la obesidad infantil, hace que se potencien los problemas bucodentales. Entre otras cosas, estos alimentos deterioran el esmalte y favorecen la aparición de caries. Por eso es importante que su consumo se produzca tan sólo en ocasiones especiales.

En cualquier caso, después de ingerir alguno de estos alimentos, el niño/a se deberá lavar los dientes.

Por otro lado, el consumo de otros alimentos como los lácteos, las frutas y las verduras pueden ayudar que los niños tengan unos dientes más sanos.

Utilizar los productos adecuados para la higiene bucodental

Además de optar por un cepillo de cerdas suaves y renovarlo cada tres meses, es importante saber qué otros productos deben estar presentes en la limpieza dental diaria.

Cuando el niño aún es muy pequeño y no tiene capacidad de escupir la pasta dental, lo ideal es utilizar sólo agua. Después se añadirá el uso de pasta dental sin flúor, para evitar manchas en los dientes y otros problemas. Una vez que el niño aprenda a escupir la pasta de dientes, puede usarse pasta dental con dosis bajas de flúor, así como colutorios que también tengan este componente.

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